SANTO DOMINGO. Un debate social sobre el momento político crítico que se vive actualmente en la República Dominicana por los escándalos de corrupción y la impunidad sacó a relucir ayer la falta de un contrapeso opositor y la necesidad de que se definan los pasos futuros del movimiento verde.
La discusión la sostuvieron diversos sectores de la sociedad en el quinto foro político social organizado por la Fundación Friedrich Ebert Stiftung que tuvo como principales exponentes al sociólogo y director del periódico La Información, de Santiago, Enmanuel Castillo y a la también socióloga Jacqueline Jiménez Polanco.
De acuerdo con Castillo, la oposición ha dejado de jugar el rol de contrapoder llamado a desempeñar en un régimen democrático y en consecuencia no se da una competencia equilibrada y transparente entre las fuerzas políticas que operan en el sistema partidario. Aduce que la oposición carece de la fuerza persuasiva de un discurso que represente los sectores de la población.
Además, plantea que el movimiento verde debe encaminar sus pasos futuros siguiendo una estrategia que produzca un nuevo “pacto por la democracia”, tal como sucedió en el año 1994.
Mientras Jiménez Polanco afirmó que el poder político dominicano opera bajo el modelo de partido cartel, a través del cual la organización oficial actúa como agente del Estado, formando pactos con otras fuerzas en base al soborno y la prevaricación.
“Ello permite el reparto del botín público por las vías administrativas, mediante el trasvase de exorbitantes sumas de dinero de una institución a otra, con garantía de impunidad y recambio de mando en el momento en que se producen críticas sociales y escándalos mediáticos”, precisó.